Enrique Garabato, Gerente de servicio de UCOT: “El ómnibus eléctrico no ha dado problemas”
En el año 2020, la cooperativa UCOT recibió sus primeras unidades eléctricas, y este mes está incorporando más unidades eléctricas de una nueva generación. Para conocer la operativa de estas unidades desde el punto de vista de mantenimiento, consultamos a Enrique Garabato, Gerente de servicio de UCOT.
¿Cómo evalúa estos primeros cuatro años trabajando con eléctricos?
No hemos tenido problemas importantes; solo detalles, como las teclas del asiento neumático del conductor, se han roto algunas teclas del tablero y dos coches tuvieron problemas con la llave del contacto que se encuentra a la izquierda debajo de la ventana. En uno de los coches tuvimos un cable flojo de un compresor, pero no mucho más en estos cuatro años en los tres coches.
Son problemas que un ómnibus convencional 0 kilómetros tiene el primer mes. El ómnibus eléctrico no ha dado problemas; además, se necesita muy poco personal para su mantenimiento. Hay que capacitar al personal porque se está realizando un trabajo extremadamente peligroso, la media tensión son 400 voltios que están presentes en los híbridos y en el eléctrico.
¿Cómo es el rendimiento de las baterías, y qué nos puede decir sobre los cargadores?
Por ahora no hay diferencia o no es notoria; las baterías tienen el mismo rendimiento de hace cuatro años atrás, cuando llegaron.
Sobre los puntos de carga, Uruguay está en el debe, es evidente que no tenemos los suficientes puntos. Lo que consume de energía un ómnibus eléctrico es mucho; nosotros en tres o cuatro horas consumimos lo que gasta una manzana de un barrio en 24 horas, es un disparate. Solo podemos cargar en nuestra terminal, no hay plan B ante una situación adversa como un apagón u otros problemas como la falla de un cargador.
Recuerdo que al inicio del plan Moves se hablaba de una terminal de ómnibus en Punta Carretas, con cargadores, eso nunca se concretó. En nuestro caso estamos haciendo nuestra nueva estación de carga en la planta de Veracierto.
¿Qué nos puede decir sobre la durabilidad de los componentes de estos ómnibus?
Como cualquier ómnibus, hay que controlar frenos y dirección, y en este caso cada seis meses hay que controlar la aislación. Nosotros elegimos YUTONG porque la suspensión y el tren trasero es alemana, es caro pero garantiza un rendimiento y una fiabilidad increíble.
En UCOT apostamos a pagar más caro frente a las otras marcas justamente por eso, por los componentes que ofrece YUTONG; vienen ensamblados de Alemania, lo que se asemeja a un bus europeo.
¿Cómo les ha ido con la autonomía?
Ahí hay un problema, en una oportunidad lo probamos en todas las líneas, uno de los coches no llegó a hacer el servicio en la línea 306; ese mismo coche con otro chofer, hizo perfectamente ese servicio.
Evidentemente decidimos no volver a correr ese riesgo porque nos va a volver a pasar, ese no es un problema del ómnibus sino del manejo, pero sigue siendo un problema. Si sumamos los nuevos ómnibus eléctricos a los que están en servicio, no alcanzan para hacer todo totalmente eléctrico, como con la línea 316; la idea es dejar una unidad de la CA1 y el resto de las nueve unidades eléctricas irían para la línea 316.
¿Cómo se soluciona esos problemas de autonomía?
Es muy sencillo, compramos ómnibus eléctricos más baratos con menor autonomía que tengan menos capacidad, y a media mañana cuando todos sacan los servicios de 10 a 15 horas, cuando merma el trabajo hay tiempo de sobra para cargar un ómnibus; claro, tendría que haber una tarifa especial en ese horario. Ahí, con ómnibus con menos baterías, se va a poder cumplir con todos los servicios.