fbpx
Internacionales

El mítico motor Scania V8 cumple 45 años


20.08.2014
El mítico motor Scania V8 cumple 45 años

La potencia, la sensación al volante y el sonido inconfundible del motor han contribuido a forjar la leyenda V8 de Scania. Con un fantástico consumo para una potencia tan elevada, ostenta una reputación de ser casi indestructible, obteniendo un excelente valor residual: el resultado es una combinación difícilmente superable.

El V8 convirtió al camión Scania en el Rey de la Carretera por muchos años. La sólida reputación establecida por el motor de 14 litros alcanzó nuevas dimensiones en la versión de 16 litros lanzada en 2000.

La rentabilidad a largo plazo es un aspecto muy importante cuando se realiza la inversión inicial. Además, hay que tener en cuenta las prestaciones complementarias que consiguen viajes más cortos. La durabilidad y fiabilidad adicionales contribuyen a mejorar el tiempo útil.

Seis años de operación en vez de cuatro reduce la depreciación del camión, especialmente con un valor residual que no tiene rival.

Estos son algunos de los detalles que muchos de los clientes de Scania V8 tienen en cuenta cuando realizan sus cálculos. Para otros fieles de este legendario motor, es imposible separarse de sus fieles compañeros de trabajo.

En algunos casos, la revisión después de 2 millones de kilómetros ha sido suficiente para darle al motor un nuevo ciclo de vida, o dos…

No se sabe aún cuál es el límite definitivo de su vida útil, pero sabemos que algunos camiones Scania V8 siguen funcionando al cabo de 5 millones de kilómetros o más.

El Rey de la Carretera

Cuando Scania quitó el velo a su motor V8 de 14 litros y 350 CV, a finales de los años 60, fue nombrado el motor diesel de camión más potente de Europa y mantuvo ese título durante muchos años.

El desarrollo comenzó en una época en que se pensaba que 250 cv ya eran bastantes. Los ingenieros de Scania-Vabis comprendieron que esa potencia no sería suficiente a largo plazo, especialmente para los transportes de madera y el transporte pesado de larga distancia, por lo que decidieron revolucionar el mercado.

La luz verde en 1962 coincidió con el desarrollo de una generación de camiones de cabina adelantada presentada en 1968. Un motor de ocho cilindros en línea no cabía bajo una cabina adelantada, ni tampoco una unidad más grande de seis.

Por ello, los ingenieros optaron por una configuración en V que encajaría bajo la misma cabina que el motor de 11 litros y seis cilindros en línea, pero desarrollando 100 cv adicionales.

 

El resultado fue un potente pero muy compacto propulsor que marcó la pauta para un nuevo nivel de prestaciones en camiones.