Valeria Kolbasiuk, directora de O.K. “El cambio a este nivel que tenemos ahora, es necesario”
O.K. se dedica a la siembra de plantaciones donde se combinan distintas especies de árboles maderables a solicitud de clientes y organizaciones. La firma tiene más de 15 años de experiencia en labranza, reforestación y administración de plantaciones.
Actualmente cuenta con más de 160 empleados, formando un equipo de trabajo sólido y profesional.
O.K. tiene la maquinaria necesaria para cumplir debidamente los trabajos, entre las que podemos mencionar: tractores, grapos con descortezadoras, excéntricas, motoniveladoras, retroescavadoras, rolos, autocargadores, ómnibus, combis, camionetas.
La empresa cuenta con un vivero propio con una capacidad para 2.000.000 de plantines, en el cual invirtió para obtener una infraestructura que optimice la producción, crecimiento y traslado de los plantines.
Para conocer más detalles, dialogamos con Valeria Kolbasiuk, licenciada en administración y en proceso de terminar la carrera de contadora. Siendo la menor de los hermanos, actualmente es la directora de la empresa.
¿Qué nos puede decir sobre la empresa?
La empresa empezó en el año 1986; mi padre Óscar con mis hermanos Román, Willy y Eloy, comenzaron en la parte de cosecha de remolacha para Azucarlito.
Luego fueron buscando negocios y terminaron en Montes de Plata; en sus inicios empezaron con un tractor y como trabajadores, mi padre y mis hermanos. Después se fue transformando en lo que es ahora, hasta llegar a los 350 empleados.
Hoy estamos trabajando en casi todos los departamentos de Uruguay, integramos tres empresas. Tenemos la principal, que es la forestal, luego otra empresa de transporte de carga y otra que se dedica más a la ganadería, agricultura, horticultura.
Tenemos casi el paquete completo, desde la preparación de la tierra, la plantación, la cosecha, tenemos caminería -se reparan los caminos internos-, y contamos con un vivero que ahora está dando unas tres millones de plantas por año.
¿Qué tipo de vehículos y maquinaria tiene la empresa?
Vendemos mucha leña, entonces tenemos camiones que están más que nada para cubrir las necesidades del transporte de la forestal, pero también hacemos otro tipo de transportes.
Trabajamos con Interagrovial, con Montes de Plata y UPM, ahora tenemos ocho camiones, dos chatas, cazambas, remolques y jaulas de ganado.
Tenemos nuestro taller propio, ahí hacemos todo lo que es reparación de nuestras maquinarias. Contamos con taller mecánico, metalúrgico y tenemos la parte hidráulica, en nuestros talleres arreglamos todo.
Contamos con una flota de 60 tractores, 11 forwarders y harvesters para toda la parte de cosecha. Tenemos unos 50 vehículos y cosechadoras y sembradoras.
Siempre estamos innovando en maquinaria, para nosotros la tecnología y la seguridad de lo que hacemos es primordial.
Buscamos productividad y calidad, las máquinas avanzan cada vez más rápido y las flotas hay que cambiarlas. Cada cuatro años se hace un contrato y se renuevan porque después quedan obsoletas.
¿Por dónde viene la apuesta de la empresa?
En realidad, nosotros apostamos para todos lados. Recientemente, adquirimos un invernáculo en Zona Franca, lo vamos a instalar acá en Paysandú para todo lo que es vivero y horticultura, también queremos expandir esa parte.
Tenemos planeado instalar el sistema de riego en la zona de Casablanca, en un campo que tenemos de unas 600 hectáreas que la mitad van a estar regadas.
También tenemos proyectos a nivel forestal, estamos planeando un salto internacional. No puedo comentar mucho, pero vamos a ir a trabajar a otro país, en el mismo rubro forestal, pero para nosotros es un crecimiento aparte.
Según tengo entendido, este país a donde vamos ya hizo algo, pero no está tan desarrollado como acá. Entonces vamos a proponer nueva tecnología, nuevas máquinas que no se estaban usando.
¿Trabajar en familia es complicado?
Siempre estamos tratando de crecer, de abarcar más, pero en familia, eso es fundamental. Lo cual es un punto a favor, pero también es un punto complicado, cualquier empresa familiar tiene sus problemas, obviamente. Porque una cosa es sentarte acá en la oficina a conversar de los números y otra cosa es juntarse un domingo. Son cosas complejas, pero nosotros las vamos llevando bien.
Personalmente, estoy en este puesto de directora a partir de este año y he tenido diferentes opiniones. Ellos crearon todo esto y hace años que lo hacen, entonces, vine a agregar un poco de innovación y estructura. La verdad, cuesta, pero hay que entender que el cambio a este nivel que tenemos ahora, es necesario.