¿Qué hacemos con los usados?: La palabra de Automotora Ariel Acevedo
En la tradicional automotora canaria de la ciudad de Progreso que tiene más de 20 camiones usados a la venta, dialogamos con Roberto Budes, responsable de ventas.
¿Cómo ven el mercado de los usados?
El problema es qué hacer con los camiones más viejos porque las empresas compran nuevos y los más viejos van quedando y cada vez tienen menos trabajo, eso en algún momento va a complicar. En cuanto a la comercialización de los usados se está vendiendo bastante entre particulares, las ventas on line y el diario son los primeros intentos y si no lo venden van a la automotora.
El términos generales el mercado de los usados se ha ido trancando de a poco, en nuestro caso por ejemplo solo estamos tomando camiones posteriores al año 2000, eso lo hacemos porque no se venden los camiones más viejos y por el tema de la antigüedad de los camiones profesionales de carga. Hemos perdido categorías de camiones profesionales por ese tema, hoy en día le pedimos a un transportista que lo deje dentro de la flota hasta que se venda.
¿Los transportistas en la actualidad amplían o renuevan?
En nuestro caso tenemos de todo un poco, hay gente que está agregando unidades en su flota porque el Uruguay no solo se mueve por el grano y la madera. Se está moviendo bastante el mercado de los camiones con volcadora, en ese sector se están agregando camiones.
¿Qué segmento de camiones nuevos es el más demandante y cuál es el más estancado?
El tema de la logística y agencias requiere muchos repartos y distribuciones y requiere camiones livianos y es un sector que se sigue moviendo, el segmento de 200 hp a 300hp es lo que más vendemos. Los pesados como los camiones tractores de más de 400 hp son los que más se han trancado.
¿Qué factores tendrían que cambiar para que los usados se comercialicen de forma más continua?
Va a tener que haber un precio a la baja para que el sector se dinamice, incluso en los más nuevos porque si la diferencia no es muy importante se va al nuevo.
El transportista que busca un camión de U$S 100 mil no va a gastar U$S 85 mil en un usado, ni lo piensa, prefiere uno cero, en ese segmento tiene que haber una notoria diferencia para que el comprador elija ese camión usado.