Pedro Sorhuet: “Un viaje de 45 asientos disponibles”
Pedro Sorhuet viene de una familia vinculada al transporte y especialmente a la recordada O.N.D.A. desde su fundación. Su padre, tío y abuelo trabajaron en dicha empresa, y su familia entera está vinculada a los inicios de la O.N.D.A. Su pasión siempre fueron los ómnibus y con el paso del tiempo pudo tener el suyo.
Para conocer su historia viajamos hasta Colonia a dialogar con él.Para conocer su historia viajamos hasta Colonia a dialogar con él.
¿Cómo surge la idea de tener un ómnibus?
En una primera instancia surge simplemente para satisfacer el hobby, obviamente con el apoyo de la familia, posteriormente proyectando hacer un motor home.
Este ómnibus estaba cerca, lo tenía un club de fútbol, se mantenía en muy buenas condiciones. Hace poco más de un año que lo tengo y realmente lo hemos usado muy pocas veces, pero viene siendo el paseo de los domingos por Colonia y es un goce familiar tener un viaje de 45 asientos disponibles.
¿Qué detalles nos podés contar de tu ómnibus?
Es un Mercedes Benz 0 303 alemán del año 1978, a los pocos años llegó a Uruguay como donación, se le adaptó un motor 366 turbinado de 200 hp Brasilero, caja de 5 marchas y aire acondicionado adaptado.
Otra reforma grande que tuvo, es que se le cerró la segunda puerta; los asientos no son originales, tiene los que eran de los ómnibus TMC de la O.N.D.A. Este ómnibus lo usaban en lugares muy fríos, su motor original era un V6 alemán, entre los detalles tiene una serpentina para calentar el agua para ayudar al arranque, en esas condiciones.Tiene por otra parte una excelente dirección, lo metés en cualquier lado; en carretera no percibís ningún ruido, el chofer puede charlar con los pasajeros de los primeros asientos sin ningún ruido a aire.
¿Es verdad que querías llegar a tu casamiento en el ómnibus?
Sí; el ómnibus lo compramos el mismo mes que nos casamos e iba a ser utilizado para llegar a la fiesta del casamiento, lamentablemente no destrabó el freno y tuvimos que entrar en un auto. Con mi Señora, Valeria, lo habíamos dejado todo limpio y prolijo para el acontecimiento, pero en ese momento nos falló.