Volare da inicio a la producción de los primeros vehículos en Espirito Santo
La empresa concluyó la primera fase del complejo industrial y prevé fabricar 800 unidades en 2015.
Volare, principal fabricante de vehículos livianos para el transporte de personas, perteneciente a Marcopolo, concluyó las obras de la primera fase de su complejo industrial y dio inicio a las actividades de su fábrica localizada en el municipio de São Mateus, en el Estado de Espírito Santo. En la celebración que contó con la presencia del gobernador del Estado, Renato Casagrande, del prefecto del municipio, Amadeo Boroto, y de otras autoridades de la región, la empresa promovió la inauguración de la nueva línea de montaje de la actual familia Volare y presentó las primeras unidades producidas de los modelos W9 y DW9.
Primera montadora de vehículos en instalarse en el Estado, la empresa pretende producir más de 800 unidades en 2015, que serán destinadas a los mercados nacional e internacional. La construcción de la nueva fábrica en Espírito Santo tiene como objetivo mejorar la atención al creciente mercado de vehículos de transporte de personas y, por la mayor facilidad logística, elevar la competitividad de la marca en las regiones Norte y Nordeste de Brasil y también en el exterior.
Además de la modernidad de las instalaciones industriales y de los procesos productivos como uno de los principales diferenciales de la nueva fábrica, Volare también cumple el programa de generación de empleos y de formación de mano de obra especializada para el montaje de los vehículos, con la contratación de aproximadamente 200 colaboradores a ser realizada en 2015.
La fábrica también injerta al Estado de Espírito Santo en modernos procesos productivos, con concepto inteligente para todos los sectores, especialmente el layout para la línea de montaje, con atención especial a la sustentabilidad, al bienestar, la seguridad y el confort de los colaboradores. Antes de la producción industrial, el proyecto envolvió la preocupación por el elemento humano, responsable por las operaciones de montaje de los vehículos. Comenzando por la localización de la fábrica, construida en un terreno plano para facilitar la locomoción de los vehículos durante la fase de producción, así como el movimiento de materiales y la logística interna.
Los predios, con pie directo libre de 10 metros, ventilación permanente provocada por las técnicas aplicadas en la edificación, tejado y laterales dobles para reducir el calor, e iluminación natural, son algunas de las características que convierten la unidad de São Mateus de Volare en una fábrica con los modernos procesos de producción de Marcopolo.
De acuerdo con el concepto de fábrica inteligente, la unidad industrial representa un modelo innovador, con recursos técnicos y sistemas para proporcionar un ambiente interno limpio y claro, por intermedio del aprovechamiento de la luz natural y de las corrientes de viento típicas de la región. Placas prismáticas, que ofrecen 500 lux y luminarias en LED con sistema automático amplían la luminosidad y reducen el consumo de energía eléctrica.
Fábrica ecológica
La nueva fábrica se constituyó también con un modelo ecológico. Desde antes del inicio de la preparación del terreno los proyectistas procuraron valorizar y preservar el medio ambiente y la sustentabilidad. La implementación de la fábrica no exigió ningún tipo de desmalezamiento por el hecho de que la mayor parte del terreno fue destinado al cultivo de eucaliptos. Todas las acciones fueron definidas por los órganos ambientales con acompañamiento permanente de biólogos y especialistas en rescate animal y de equipos de arqueología.
Junto a todos esos recursos técnicos, el proyecto prevé, de forma rigurosa, la utilización de toda el agua necesaria para consumo humano y para la actividad industrial, por intermedio de la captación de los tejados y rutas en los períodos de lluvia, almacenada en un lago con capacidad superior a 10 millones de litros. Para la más eficiente utilización de los recursos hídricos, el agua utilizada para consumo humano será reaprovechada, siendo reutilizada en los sanitarios y para a irrigación. En São Mateus, Volare construyó una de las más modernas ETE / ETA (estación de tratamiento de efluentes y de agua) que atiende todas las exigencias de los órganos ambientales.
La fábrica también posee tejado doble con la parte central con aislante térmico, calentamiento del agua por placas solares para la utilización en el comedor y los vestuarios y el programa de recolección selectiva de residuos. La renovación natural del aire ambiente es proyectada para 12 cambios por hora, con ventilación natural y continua.
Otros recursos que favorecen la preservación ambiental y la sustentabilidad son los sistemas de abastecimiento de materiales de forma optimizada, que reduce el movimiento de los operadores.
La fábrica que Volare inaugurada en São Mateus inserta al Estado de Espírito Santo en la industria automovilística y constituye, en mas, una etapa importante en la historia de la marca y de la propia empresa. De un modelo de vehículo, lanzado en 1998, en 16 años, se transformó en fabricante de una completa línea, reconocida nacional e internacionalmente. De la producción inicial de 20 unidades por mes, pasó a más de 25 vehículos por día, y ahora se instala en São Mateus con el objetivo de producir más de 800 vehículos ya en su primer año de actividades.
Representa una natural evolución de la importancia del transporte colectivo en Brasil, especialmente en las diferentes formas de segmentación, a las cuales Volare se adaptó, desenvolviendo modelos específicos para los variados nichos que surgieron en el mercado brasileño e internacional.
Crédito das fotos: Eduardo Ferreira
Secco Consultoria de Comunicação
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