Comienzan pruebas en una mina con el camión a batería más grande
La marca ofrece una gama completa de equipos eléctricos de batería subterráneos y con la mayor base instalada de más de 600 unidades eléctricas en todo el mundo.
En los trabajos subterráneos, al lograr cero emisiones de diésel, se obtienen reducciones significativas de calor, y niveles más bajos de ruido y vibración contribuyen a un entorno más saludable y seguro para sus operadores.
Con la menor producción de calor, se logra menores costos de ventilación y refrigeración, lo que, cuando se combina con una mayor aceleración, velocidad de operación y tiempos de carga, proporciona un sólido argumento comercial.
El camión dumper subterráneo TH665B de Sandvik, recientemente presentado por la marca, cuenta con tecnología de batería de fosfato de hierro y litio avanzado (LiFePO4), que no emite emisiones de escape subterráneas en comparación con los motores tradicionales.
Este vehículo capaz de desarrollar 845 cv viene siendo probado desde el pasado mes de setiembre en Australia.
Darren Kwok, Director de Electrificación y Tecnología de Perenti, empresa matriz de Barminco, expresó su entusiasmo por los logros que puede alcanzar este prototipo de Sandvik. “Como empresa, estamos enfocados en intentar ayudar a nuestros clientes a descarbonizar sus minas. Probar nuevos equipos para respaldar este objetivo es una parte fundamental de nuestra estrategia”, afirma. “Los vehículos eléctricos de batería no sólo tienen el potencial de reducir las emisiones de carbono, sino que también pueden mejorar el entorno subterráneo para los trabajadores mineros e impulsar la eficiencia de las operaciones”, añadió.
Andres Dawson, responsable de la línea de negocio de carga y transporte de Sandvik, asegura que, “estos vehículos eléctricos pueden mejorar la productividad y el rendimiento en el manejo de residuos orgánicos, reducir tiempos de trabajo, reducir costos operativos y reducir gastos relacionados con ventilación y refrigeración. En términos de sostenibilidad, contribuyen a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, mejoran la eficiencia energética y promueven la independencia de los combustibles fósiles”. Además, “ofrecen otros beneficios relacionados con la salud y seguridad de los operadores, al reducir las emisiones de partículas diésel, reducir el ruido y las vibraciones y minimizar la generación de calor.”
También explicó los próximos pasos que seguirán a esta prueba piloto: “evaluaremos todos los datos que obtengamos del prototipo interactuando con las condiciones australianas, mientras Sandvik continúa desarrollando su gama eléctrica de batería”.