Eduardo Nicoloff, Propietario de Sol Antigua: “Un mes antes de la pandemia me endeudé en 300.000 dólares”

Sol Antigua es uno de los dos prestadores de transporte que realiza el servicio urbano en la ciudad de Colonia del Sacramento. En el año 2010, Eduardo Nicoloff inició la empresa de transporte con ocho ómnibus, seis de ellos con 20 años de antigüedad, el máximo permitido para prestar servicios en esa ciudad. En la sede de la empresa conocimos detalles y su actualidad, de la mano de su propietario.

Sol Antigua es uno de los dos prestadores de transporte que realiza el servicio urbano en la ciudad de Colonia del Sacramento.

En el año 2010, Eduardo Nicoloff inició la empresa de transporte con ocho ómnibus, seis de ellos con 20 años de antigüedad, el máximo permitido para prestar servicios en esa ciudad. En la sede de la empresa conocimos detalles y su actualidad, de la mano de su propietario.

¿Qué nos puede decir sobre el inicio?

La empresa comenzó el 1 de febrero del año 2010 con una flota de ocho ómnibus, dos de ellos Busscar del año 2001, y los otros seis, Zanello del año 1990. En ese momento teníamos la línea al Real de San Carlos, el urbano que va hacia la Ruta 21 y la línea a El General.

Por ese entonces fuimos a hablar con Enrique Berrutti que tenía unos ómnibus parados y nos vendió y financió dos Mercedes Benz Allegro. Ahí pasamos a tener 10 coches.En el año 2021 comenzó la obra de Montes del Plata y para nosotros fue “un extra”, por decirlo de alguna manera.

Durante tres años la población de Colonia creció con las viviendas que había para los trabajadores de la obra; por la tardecita cuando venían de la planta salían a hacer mandados y viajaban en ómnibus. Durante esos tres años la venta de boletos aumentó entre un 30 y 40%. Antes esos turnos volvían al centro con cuatro o cinco pasajeros y en esos tiempos en una parada te subían 40 pasajeros que iban a hacer mandados.

¿Cómo aprovechó esos años de bonanza?

En Colonia hay una reglamentación muy estricta que admite un máximo de 20 años en las unidades y necesitábamos renovar. En una primera instancia fuimos a Marcopolo a hablar con Jorge Del Río, quien nos financió cuatro ómnibus Mercedes Benz Caio.Por esos años había posibilidades de destinar coches para ir a trabajar a Montes del Plata, pero decidí renovar la flota y en el año 2013 adquirimos los primeros ómnibus 0 kilómetro, tres Mercedes Benz Marcopolo Torino, nuevamente financiados por Del Río ya que la empresa era muy nueva y no tenía crédito en los bancos.

Entendí que era mucho más rentable tener vehículos nuevos que usados, por lo que en 2015 nuevamente trajimos ómnibus nuevos, llegando a 11 ómnibus en la flota.

¿Cuándo incorporan tecnologías en las unidades?

En el año 2016 el entonces Intendente Moreira nos llama a una reunión a todas las empresas del departamento para comunicarnos que el siguiente año teníamos que tener las máquinas así trabajábamos directamente con el MTOP por el tema de los boletos gratis.En contacto con la gente de Busmatick, hicimos la prueba con la primera máquina en diciembre del año 2016, y en marzo del año 2017 teníamos las máquinas en todos nuestros ómnibus funcionando. Armamos el centro de recarga.

Fue una inversión importante de unos 60.000 dólares, más los costos de mantenimiento mensuales; para eso realizamos un leasing. Durante ese proceso el MTOP me dio las tarjetas STM.

¿Cómo estaba la venta de boletos en esos años que ya había terminado la obra de Montes del Plata?

Ahí ya habíamos vuelto a los niveles del año 2011; apostamos a la tecnología en parte porque se nos había dicho que íbamos a cobrar el 100% de los boletos transportados, pero hasta el día de hoy cobramos el 50%.Por la “novelería” de la incorporación de las tarjetas, empezaron a viajar más chiquilines. La gente en general entendió que era práctico.

¿Cómo estaba la empresa cuando llegó la pandemia?

Estaba terminando de pagar el leasing de las máquinas expendedoras, tenía que renovar recién en el año 2021 pero me adelanté. En el año 2019 compramos tres micros automáticos Volare, esas unidades llegaron el 6 de enero del 2020.

Un mes antes de la pandemia me endeudé en 300.000 dólares; pudimos subsistir gracias a las ayudas, quizás hubiésemos necesitado más, pero es algo que ha sido fundamental en el interior.

La venta de boletos cayó un 17%, pude vender un ómnibus del año 1999 y dos micros del año 2001, y más las ayudas, pude pagar las cuotas del año 2020. Llegamos a tener que vender uno de los tres micros nuevos que habíamos incorporado y tuvimos que refinanciar las deudas.

¿Cómo está el flujo de pasajeros en la actualidad?

Con la competencia estamos en relativa buena sintonía y al racionalizar los servicios, ambas pudimos subsistir. Ellos andan por la zona del Real de San Carlos y nosotros cubrimos la zona del barrio El General. Ahora estamos con un 60% de los pasajeros transportados, se está retomando el ritmo, pero todavía falta. No creo que pueda crecer mucho más el transporte urbano, pero es cierto que hemos racionalizado turnos. 

En verano el traslado de pasajeros siempre es bajo, luego con los estudiantes mejora, entre las 7 y las 9 horas salen siete coches a la calle, y luego andan tres durante el día, la logística es muy complicada.

Para nosotros la presencialidad de los estudiantes es muy importante y los escolares más allá de que viajan gratis, siempre alguna madre viaja con ellos y es algún boleto más que se vende.

Antes, en los días pagos que tenían los jubilados se vendían muchos boletos, eso ahora ya no corre más. Por ejemplo, hoy en el barrio El General hay un supermercado que tiene un Red Pagos donde cobran más de 3000 jubilados; antes se tenían que trasladar hasta el centro.

¿Se sale fortalecido luego de una crisis tan importante?

Creo que sí, nosotros no hemos tenido ningún problema con el personal. En la empresa éramos 17 o 18 funcionarios, justo había varios para jubilarse, los más veteranos dieron un paso al costado. La empresa decidió en ese momento darles un despido que si bien no correspondía, era una ayuda y se fueron con un extra.Primero hicimos una rotación en el seguro de paro y después, por consenso, quedaron tres choferes en el seguro que eran los que tenían otra entrada o no necesitaban. Acá no hemos tenido problema con el personal.