Manuel Patiño, propietario de SATT: “Sinceramente, creo que la gente que le falta recuperar, no va a volver al ómnibus”
La empresa SATT con base en Atlántida cuenta entre semana con 16 unidades que circulan entre ese punto y Pando, Estación Atlántida, Jaureguiberry y Soca, además de los balnearios y localidades aledañas.
La empresa también realiza traslados y viajes de turismo. Para conocer detalles, dialogamos con Manuel Patiño, dueño de la empresa.
¿Cómo les impactó la llegada de la pandemia?
Cuando cae la pandemia desapareció la gente, algo nunca visto, el impacto fue muy grande para las empresas del interior. No sabíamos cómo íbamos a salir a la calle y con qué ibas a salir, no queríamos dejar a los pocos vecinos que viajaban de a pie, pero teníamos que restringir los servicios, si no, no se podía seguir adelante.
Fue un desafío muy grande. Empezamos con el seguro rotativo de conductores, primero bajamos un 20%, seguimos con un 30% hasta llegar a más del 50%, pero no más de eso; teníamos miedo de dejar sin traslado a las pocas personas que viajaban.
Teníamos tres micros en ese momento y nos dieron un resultado bárbaro para el poco movimiento que había; esos micros trabajaban todo el día haciendo seis turnos y eso nos ayudó como empresa a poder mantenernos, por los costos diferenciados de esos micros. La baja en la venta de boletos llegó a estar al 20% de lo habitual.
¿Cómo está el movimiento de pasajeros actualmente?
Durante dos años nosotros no movimos los coches de turismo, recién ahora se empezó a mover, pero ese sector aún está flojo.
Con la línea no llegamos al 80% de lo que trasladábamos antes de la pandemia. Ese porcentaje quedó estancado por las distintas modificaciones que trajo la pandemia, como el teletrabajo y la gente en seguro de desempleo.
Sinceramente creo que a quienes les falta recuperar, no van a volver al ómnibus. Se puede rescatar algo más, pero muy poco.
¿La pandemia afectó la renovación?
Eso no nos afectó, ya teníamos un plan de renovación, ya habíamos adquirido los coches a los que estamos transformando. Vamos unificando la flota con 12 Marcopolo Torino generación 5 y 4 Marcopolo Torino generación IV.
Vendimos los micros. Nos quedaron pequeños con el regreso de la gente; en ciertas ocasiones teníamos que mandar un auxilio porque los micros no podían con la cantidad de personas, entonces resolvimos venderlos.
Sustituimos esos micros y ahora estamos renovando unidades del año 1993; luego hay que esperar para ver qué va a pasar con los eléctricos. Las empresas grandes pueden obtenerlos de una manera distinta a las más pequeñas, así que esperemos que la próxima renovación sea con eléctricos.