Servicio Urbano de Mercedes - Gustavo Velazco de Chevel: “En 20 años se ha perdido un 40% de la venta de boletos”

Desde hace 22 años la capital de Soriano cuenta con Chevel para efectuar el servicio urbano, siendo hoy la única empresa que lo realiza. A lo largo de su trayectoria ha sabido competir, ha incorporado unidades nuevas y se ha sobrepuesto a situaciones adversas. Dialogamos con Gustavo Velazco, uno de sus socios creadores, para conocer detalles de la transportista.

A poco de cumplir 90 años de iniciado el primer servicio de ómnibus urbano en la capital de Soriano por parte de Adripino Rodríguez con una Ford T, en cuyos inicios debió competir con los carruajes que cumplían tal fin, la realidad marca que dicha ciudad cuenta en la actualidad con una única empresa que ha logrado incorporar el 100% de su flota 0km. 

Hace 22 años Horacio Chele y Gustavo Velazco estaban vinculados al transporte de carga, ambos tenían camiones recolectores de basura que eran contratados en la comuna. 

Puliendo la relación con los años y buscando nuevos horizontes es que surgió la clásica pregunta de ´qué otra cosa se puede hacer´, una de las interrogantes que más se hacen los empresarios de nuestro país. 

Aquel viejo adagio que reza que hay que poner los huevos en diferentes canastas es lo que motivo a éstos dos empresarios de la ciudad de Mercedes a incursionar en el transporte de pasajeros. 

Así es que adquieren una línea con un ómnibus -un Mercedes-Benz O140- y con la primera sílaba de ambos apellidos crean el nombre CHEVEL. “El primer año manejaba un turno además de hacer la mecánica y limpieza de la unidad para cubrir mi parte de la compra”, recuerda Velazco. 

Sobre esos primeros tiempos, Velazco no puede evitar comparar la cantidad de personas que utilizaban el servicio con las de hoy en día: “En 20 años se ha perdido un 40% de la venta de boletos. La principal razón es la moto pero hay costumbres que no están más como la ida al cementerio, recuerdo los 2 de noviembre que teníamos que poner los tres ómnibus e iban llenos. Hasta poníamos a una persona para cobrar los boletos antes de subir, eran muchísimas personas las que viajaban”, señaló el transportista.  

A pesar del flujo de pasajeros, poner en servicio todos los días las viejas unidades no era ni barato ni fácil. “La empresa empezó a ser rentable y sustentable recién cuando llegamos a comprar los micros cero kilómetro”, señaló el transportista.  

Sobre la actualidad de la empresa, Velazco no duda en asegurar que “ahora es cuando menos boletos se vende, los costos fijos y la poca rentabilidad hace que si no tenemos a los estudiantes se termina el transporte urbano en el interior”.                     

El fideicomiso y los boletos de los estudiantes son los que hacen subsistir a la transportista; 2 líneas, 3 ómnibus, 5 choferes, un inspector, una limpiadora, un mecánico y un chapista casi a la orden, hacen que la empresa tenga un alto costo operativo. 

Los transportistas deben poner dinero para mantener el servicio en meses de baja venta y que no tienen el subsidio departamental. El plan de renovación que venían realizando es imposible de seguir ante esta situación de baja en las ventas de boletos.               

El vandalismo en el interior de las unidades es parte de la realidad, asientos rotos y rayados son parte del día a día, además de que las pedreas con las consecuentes roturas de vidrios también se han incorporado a la realidad del servicio de transporte urbano en Mercedes.    

UN POCO DE HISTORIA

El servicio de ómnibus de Mercedes en Soriano llegó a estar a cargo de la comuna departamental, quien a principios de los años 70 adquirió varias unidades urbanas y una carretera; las primeras eran para atender sus 4 líneas, las que cubrían la ciudad de a dos por servicio.    

Luego la comuna vendió a un Carminatti, dejo dos líneas y destino el resto al servicio de la construcción de la Represa de Palmar. Luego de culminada la construcción de la represa el servicio urbano quedó a cargo de Irigoyen, quien falleció, quedando a cargo su viuda, Blanca Acquistapace de Irigoyen.

Más tarde, esta línea es adquirida por Chele y Velazco junto con un Mercedes-Benz O 140 con el que se inició la empresa CHEVEL. Allí compartieron el servicio urbano con la empresa de Acland, quien luego vendió a Viotti.        

Actualidad

Hoy, Chevel es la única empresa que realiza la línea urbana en Mercedes, pero llegaron a haber otros dos en simultáneo. El servicio está compuesto por dos líneas con dos ómnibus circulando diariamente y uno de reserva: un Volkswagen Busscar del 2001, un Agrale Marcopolo Senior y un Mercedes-Benz Marcopolo Senior del 2013 componen la flota adquirida en su totalidad cero kilómetro.