José Manresa de PUERTO FRESCO: “En el año 1992 empezamos a ir a la ciudad de Paysandú a vender pescado”
La empresa Puerto Fresco industrializa y vende productos de mar en sus puntos de venta que recorren buena parte del país, a través de camiones equipados para tal fin.
Desde su planta procesadora en la zona del Hipódromo de Maroñas, en Montevideo, todos los días salen camiones a recorrer rutas y llegar con productos frescos a los hogares del interior.Desde su planta procesadora en la zona del Hipódromo de Maroñas, en Montevideo, todos los días salen camiones a recorrer rutas y llegar con productos frescos a los hogares del interior.
Actualmente en la empresa familiar trabaja la tercera generación. Sus orígenes se remontan al año 1954, cuando Manuel Manresa solamente con una mesa, comercializaba pescado en las ferias. Hoy Puerto Fresco cuenta con 63 funcionarios y cinco camiones; vende productos de mar en Montevideo, San José, Florida, Minas, Colonia, Durazno, Mercedes, Paysandú, Salto y Rivera.
Para conocer más esta empresa, conversamos con José Manresa, hoy a cargo del negocio.
¿En qué época comenzaron a crecer? ¿Cómo se dieron los viajes al interior?
Hace unos 30 años tomamos la decisión de crecer y además de vender al público, pasar a ser mayoristas. Basicamente, comprábamos más pescado a los barcos y se lo vendíamos a quienes no podían, querían o no necesitaban ir al puerto, con las horas que eso demanda.
Vimos que en varias partes del país había vendedores de pescado, pero dejaban mucho que desear, así que sacamos un Mercedes Benz 709 0 km, le mandamos a hacer un furgón que tenía separada la cámara de la atención al público, y en el año 1992 empezamos a ir a la ciudad de Paysandú a vender pescado.
¿Cómo ha sido la evolución de este alimento? ¿Ha cambiado el hábito de comer pescado?
La gente aquí quiere filetes y si puede ser sin espinas, mejor; en otros países con tradición de comer pescado lo último que te piden son los filetes, se compra el pescado entero.
En Brasil es altísima la venta de pescado entero, en nuestro país la venta de pescado entero en relación al filete no llega al 1%. Los hábitos de la sociedad están cambiando y no solo en nuestro rubro, por ejemplo, el pollo cada vez ocupa más espacio en las góndolas de los supermercados, y se compra más lo fraccionado que el pollo entero; hasta la carne se vende hoy en cuadraditos para el guiso.
La gente cada vez quiere tocar menos los alimentos, el pescado no es ajeno a esto y el crecimiento de la venta pasa por el preparado. En el año 2004 acondicionamos una parte del salón para empanar milanesas en el momento, eso significa un 15% de las ventas y eso viene en crecimiento.
¿Qué productos o servicios fueron incorporados recientemente?
Ahora estamos incorporando la venta de pescado condimentado en porciones envasados al vacío, con 10 días de vida útil. También empezamos con el e-commerce que es la venta por internet de nuestros productos. La venta por internet tiene entrega a domicilio en Montevideo y próximamente estará en el interior, donde va a ser retirada en los puntos donde paran nuestros camiones. Estamos con el desarrollo de productos nuevos, hicimos una asociación con un chef por el cual en base a pedidos vamos a vender comida elaborada con pescado.
¿La pandemia afectó la venta de pescado?
Nos afectó de distintas maneras, por ejemplo, en Salto vamos solo un día de los dos.
Cuando estuvieron los picos en Rivera, la venta se vio afectada; en Durazno por una interpretación errónea del equipo de trabajo que quedó en la intendencia no se nos permitió trabajar durante más de dos meses.
El argumento era por la aglomeración de gente en la plaza que es a donde vamos desde hace más de 20 años, y como nosotros parábamos ahí, no pudimos trabajar.