ATRAPAY: Jorge Inella, Presidente, y Fernando Francolino, Tesorero: “Acá no hubo una política del transporte para nada, cada cinco años ingresan 700 camiones del rubro forestal, y eso no puede ser”
La tradicional asociación sanducera ATRAPAY cuenta con 43 años de trayectoria; actualmente tiene 16 socios y más de 70 camiones. Desde hace un tiempo, buscando profesionalizar su trabajo, entre otras acciones, pasó a ser una GIE (Grupo de Interés Económico), simplificando por ejemplo la facturación a sus clientes, entre los que está Coca Cola.
La tradicional asociación sanducera ATRAPAY cuenta con 43 años de trayectoria; actualmente tiene 16 socios y más de 70 camiones. Desde hace un tiempo, buscando profesionalizar su trabajo, entre otras acciones, pasó a ser una GIE (Grupo de Interés Económico), simplificando por ejemplo la facturación a sus clientes, entre los que está Coca Cola.
La actividad de los transportistas sigue en plena actividad a pesar de la pandemia pero los problemas que enfrentan son otros, como nos cuentan Jorge Inella, Presidente, y Fernando Francolino, Tesorero de la Asociación.
¿Qué trabajos tienen en la Asociación y cómo están para renovar la flota?
Para Coca Cola, además de traer mercadería para Paysandú, vamos a ciudades como Rivera, Tacuarembó, Mercedes, Paso de los Toros o Young. Ese es un trabajo continuo, no hay tantos viajes de retorno, acá en Paysandú nos compensa Azucarlito ya que la venta de azúcar de esta empresa, viene en aumento.
Ya no hay esperanzas para muchos, el poder comprar un 0 km, es una ecuación simple; el nuevo te sale U$S 120.000 y el que tengo sale U$S 40.000, no hay trabajo que te permita absorber esa diferencia.
Tenemos una mala costumbre los transportistas y es trasladar los beneficios que conseguimos al cliente, por ejemplo al gasoil le descontamos el IVA y nosotros sacamos los costos en base a un combustible sin IVA; el camionero tiene que entender que ese beneficio es de él y no tiene porqué trasladarlo. El transportista está con muchos impuestos, no podemos trasladar los pocos beneficios que tenemos.
¿Qué opciones tiene un transportista sanducero para mejorar la flota?
Acá en Paysandú hay muchos camiones, es lo que pasa en todo el país, con las renovaciones de los camiones forestales se distorsiona mucho porque esos camiones ingresan a otros rubros pero el camión viejo no sale de la plaza, entonces son más camiones para los mismos trabajos.
Acá no hubo una política del transporte para nada, cada cinco años ingresan 700 camiones del rubro forestal, eso no puede ser, eso produce falta de trabajo e informalidad, el valor de nuestras unidades cae entre un 30 a 40% lo que nos aleja cada vez más de llegar al 0 km.
Entendemos que el camión que entra al rubro forestal tiene que morir en ese rubro, no puede hacer otra cosa. La alternativa es que haya un sistema para que ese camión que fue renovado de las forestales con cinco años se le pueda vender al que tiene un camión viejo, pero tendría que intervenir el Estado y al camión viejo sacarlo de circulación.
¿Cómo impactó el SITRAC en la Asociación?
Creo que pasó más o menos lo mismo que en todos lados, gente a favor y en contra; en su momento se planteó de una forma donde todos estábamos de acuerdo, principalmente porque iba a haber un precio de referencia del costo del flete que era lo que todo el mundo quería.
En definitiva, parece que no era tan fácil lograr ese costo de referencia; en un inicio estábamos a favor ya que íbamos a competir todos en igualdad de condiciones con los mismos derechos y obligaciones. Luego se fue desvirtuando el tema del SITRAC con qué empresas estaban homologadas y cuáles no, así empezaron las dudas y la desinformación.
Hay que ser sinceros, el camionero muchas veces es cómodo, se hacen reuniones y no participa, entonces no se informa bien en muchos casos.